El sensacional ritmo del Chiki Chiki no es indiferente para este periódico sensacionalista.
Los pasos son muy fáciles de aprender como lo podrá comprobar y una vez tome el impulso, nada ni nadie podrá frenar su entusiasmo.
Deslumbre a sus parientes y amigos y sea la estrella en la pista de baile, aunque se esté tropezando con los ladrillos mal puestos o se empolve hasta los calzones si el piso es de tierra.
De vez en cuando nos sorprenden desde el Viejo Continente con música pensada en nosotros, que somos tan poco afectos a copiar y a imitar. No vaya a pensar que esta nota está hecha para seguir la corriente, de ninguna manera, somos originales y prueba de ello es que no vamos caer en esa complicadísima y sacrificada labor de cambiar la letra y acomodarla a nuestro gusto y conveniencia. No, nosotros vamos un paso más adelante. Nos atribuimos todo el mérito. Para qué andar con chicas.
Baila Chiki Chiki y lee y lee El Otro Amarillo, el Otro Amarillo, lo leen los logieros y los masistas, los gamonales y contrabandistas.
El Otro Amarillo, el Otro Amarillo, muévelo, muévelo, pero no lo prestes. Que el que lo quiera lo compre, que gaste el billete y no sea amarrete... Y uno, el breikdance, y dos, el crusaíto, tres, el maikelyason, cuatro, el robocó. El Otro Amarillo, el Otro Amarillo, lo bailo mejor que el Chiki Chiki. uno, dos , tres, cuatro...